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Melina Lezcano La chica sexy de la “cumbia cool”
La rubia cantante de Agapornis pasa sus días entre giras por la Costa y playa en Pinamar. Se entusiasma con los temas propios que su banda está creando para un disco que sacarán este año y asegura estar sin novio. Dice que la atraen los hombres que la hagan “reír y sean un poco cursis”.
No hay duda de que una de las bandas que más suena este verano, tanto en boliches como en playas y previas, es Agapornis, un fenómeno que año a año se supera con su música que mezcla clásicos reversionados con un muy divertido ritmo bailable. Sin embargo, no sería loco pensar que quien no conociera a la banda, podría atribuirle el éxito a lo linda que es su cantante.
Lejos de cualquier preconcepto errado, Melina Lezcano demuestra que no sólo cuenta con una belleza casi de otro planeta, sino que también posee un gran talento a la hora de cantar y un carisma envidiable.
Si bien soñó con ser cantante desde muy chica, su gran camino por la música empezó a los 13 años, en Generación Pop, un reality show conducido por Reina Reech. Allí conformó la banda juvenil Scratch y junto a otros siete chicos recorrió todo el país haciendo giras. Luego llegó la duda: “Era muy chica y le dije a mi mamá que no quería ser famosa porque no me dejaba tiempo para compartir con mis amigas, y me retiré de la música”, cuenta entre las risas de sus amigas, que la acompañan en su carpa del balneario Boutique Club de Mar de Pinamar.
¿Cómo fue que volviste y llegaste a ser la voz de Agapornis?
A los 18 empecé a modelar, y pasé por varias agencias hasta llegar a Multitalent, donde aún sigo. Después, me inicié como notera; hice un programa en Fashion Tv con Dolores Trull que me gustaba, pero siempre pensaba en volver a cantar. Después me llamaron de Super Torpe, un show musical que se emitió por Disney Channel.
¿Y desde entonces te amigaste con la música?
Nunca me había peleado (risas). Pero ya no lo hacía en público. Fue a fines de 2012 cuando me llamaron de Sony Music para que pruebe en la banda porque la cantante anterior se estaba yendo. Con los chicos pegamos una onda terrible de entrada, y empezamos a ensayar intensamente porque era una época de muchos shows.
¿Cómo fue tu debut?
Dejé de lado el modelaje y la conducción para meterme de lleno en la banda. Mi primera presentación fue en Punta del Diablo ante 10 mil personas: muy fuerte para arrancar. Y la segunda fue un show privado para Marcelo Tinelli, que nos llamó a su quinta en Punta del Este.. Después de eso, sumamos un montón de giras y los chicos de la banda ya casi se convirtieron en mis hermanos.
Luego de un 2013 con mucho éxito, ¿cómo cerraste el 2014?
Cada año que pasa pensamos que es el momento boom de la banda pero siempre nos vamos superando. Tuvimos un 2013 increíble, y el 2014 fue mejor aún, con cosas que nunca nos hubiésemos imaginado, como ganar un premio Gardel y llenar un Luna Park. Además, en el último disco sacamos cuatro temas propios.
¿Qué expectativas tienen para este año?
A fines de febrero, nos tomamos diez días de vacaciones porque estamos haciendo shows durante todo el verano. Pero cuando volvamos, la idea es seguir haciendo canciones propias para poder lanzar un nuevo disco. En lo personal, tengo un proyecto de televisión como acompañante en un programa de cable.
Es complicada la convivencia entre siete hombres y una mujer?
Podría sonar difícil por las giras, pero la verdad es que nada que ver. Nos morimos de risa. Los siento como amigos y amigas al mismo tiempo. Les cuento cosas de mujeres y ellos me dicen: “Meli no quería saber tanto” (risas). La verdad es que yo también soy bastante machona, un 80 por ciento hombre y 20 mujer. Por eso me llevo bien con ellos.
Sería un gran motivo de celos para cualquier pareja…
(Risas) Hoy no tengo por qué preocuparme, no hay amores en esta vida. ¡Que viva la soltería! (risas).
